“Tengo que empezar a escribir para tener ideas”. Lo dijo Françoise Sagan y no puedo estar más de acuerdo. Muchas veces me he visto respondiendo eso -o algo parecido- cuando me preguntan “¿qué ideas tienes?, ¿qué se te ocurre?”. No es ganas de hacerme la misteriosa, lo juro, es la pura verdad. Hasta que no…